jueves, 3 de abril de 2014

El primer día del resto de tu vida

Te encuentras delante de una maleta vacía  decidiendo, libreta en mano, qué elegir y qué no para poner dentro.
Sabes que tendrás que cargar durante un largo viaje con ella y tu espalda no está ya para llevar demasiado peso así que no es fácil decidir.
En tu armario, repleto de recuerdos, algunos están tan deteriorados que tienes la sensación de que nunca vas a poder utilizarlos de nuevo.



Pero cuando evocas los momentos que hay detrás de cada uno de ellos siempre encuentras un motivo para guardarlo pensando que algún día serán útiles de nuevo.
Y vuelves a cargar con ellos.
Pero esta vez es un viaje de no retorno.
No tienes espacio para llevar objetos inútiles.
No tienes tiempo para decidir con la balanza de tu corazón y tu cerebro.

Eres consciente de que si siempre repites los mismos actos, alimentados con los mismos sentimientos y los mismos recuerdos, recorrerás siempre los mismos senderos.
Y esa sensación de ir siempre cargada con toneladas métricas de sentimientos inútiles y frustrados te obliga a tomar una decisión rápida e inesperada.
Decides romper con todo y vaciar tu almacén de objetos perdidos en el recuerdo para cargar tu maleta de nuevos sueños y nuevas experiencias.
Cierras la puerta sin saber seguro hacia dónde te llevarán tus pies.
Pero, por primera vez, te sientes realmente ligera.
Hoy es el primer día de todos aquellos que te quedan por vivir y no tienes intención alguna de malgastar la oportunidad de vivirlo con intensidad.




Still falling
Breathless and on again
Inside today
Beside me today

Around broken in two
Till your eyes shed into dust
Like two strangers turning into dust
Till my hand shook with the weight of fear

I could possibly be fading
Or have something more to gain
I could feel myself growing colder
I could feel myself under your fate
Under your fate

It was you breathless and torn
I could feel my eyes turning into dust
And two strangers turning into dust
Turning into dust

Into dust. Mazzy Star